A brace retainer set in a container

TIPOS DE RETENEDORES REMOVIBLES: ¿CUÁL ES EL ADECUADO PARA MÍ?

Si has pasado por un tratamiento de ortodoncia para alinear tus dientes, los retenedores son una forma de proteger la inversión que has hecho en tu sonrisa. Pero ¿cuál debes elegir? Aunque tu dentista te aconsejará cuál es el adecuado para tus dientes, nunca está de más ir algo preparado a la cita y ver cuál puede ser el más adecuado a tus necesidades.

¿Por qué necesito un retenedor?

Después de un tratamiento de ortodoncia, si dejas a los dientes abandonados se pueden mover. Usar un retenedor durante el tiempo que te aconseje el dentista ayudará a mantenerlos en su sitio mientras le das a la encía y al hueso que lo soporta el tiempo para que se ajusten a la nueva colocación.

Elección entre diferentes tipos de retenedores

Como vas a pasar mucho tiempo con tu retenedor, es importante hablar con tu dentista sobre el tipo de retenedor que más te conviene. Puedes preguntarle a tu dentista sobre diferentes aspectos: el impacto en tu apariencia y habla, la estética, la experiencia de uso, los materiales utilizados, la comodidad, la higiene, la durabilidad, el precio y si quieres tener la flexibilidad de retirar el retenedor cuando quieras comer, limpiarlo o besar a alguien.

Sigue leyendo para descubrir algunos de los pros y los contras de los diferentes tipos de retenedores removibles.

Retenedor acrílico removible

Hecho de una combinación de metal y plástico, el retenedor tradicional puede ser tan duradero como práctico cuando lo cuidas. Al tener una composición metálica puede permitir el ajuste después de la primera vez que lo pruebes y también se puede quitar para comer y limpiar. También es importante limpiar regularmente el retenedor siguiendo las indicaciones de tu dentista para evitar la acumulación de bacterias que pueden causar mal aliento y manchas.

Retenedor transparente

Los retenedores transparentes, como su nombre indica son casi “invisibles” y no desviarán la atención de tu sonrisa.

Están moldeados en plástico fino o poliuretano, estos retenedores transparentes y removibles están diseñados específicamente para adaptarse a tu boca.

Tu dentista te dará consejos y guiará, de toda formas,  puede ser necesario reemplazarlo frecuentemente y como todos los retenedores, requiere una limpieza regular para evitar la acumulación de bacterias que pueden causar mal aliento y machas o amarilleamiento.

Decidas el retenedor que decidas, tu dentista tendrá la última palabra.